La situación que vive Marina del Este, afectada por la desidia y poca firmeza de la Junta de Andalucía para solucionar el conflicto actual entre el antiguo concesionario y el actual, es reflejada en un extenso reportaje publicado en el Ideal de Granada.

Podría ser el pequeño Marina D'or de la Costa Tropical y sin embargo hoy en día Marina del Este es un puerto desangelado y fantasma. El Puerto deportivo de La Herradura, el único de la Costa Tropical que incluye alojamientos turísticos (el de Motril solo tiene los amarres), debería ser un motor y fuente de riqueza para el destino turístico y sin embargo, desde hace ya casi siete años, es tan solo una fuente de conflictos.

El enfrentamiento legal entre la actual concesionaria y la anterior, que considera parte de los terrenos del puerto de su propiedad y los mantiene 'ocupados', tiene hundido al pequeño puerto deportivo en una situación surrealista. Ni se puede construir, ni se pueden acabar las obras de los hoteles que se quedaron bloqueados en 2001, ni se pueden sacar adelante los negocios porque están divididos en dos partes: los que reclama una concesionaria y los que reclama la otra. Ante tal caos y falta de servicios, los visitantes del puerto brillan por su ausencia.

El conflicto va camino de cumplir siete años sin visos de solución. La actual concesionaria, Marinas del Mediterráneo, que recibió en 2001 una concesión «con todo tipo de irregularidades» cree que la culpa la tiene la «desidia» de la Junta, que ha permitido esta situación durante siete años, al no zanjar el conflicto. Y es que es la Empresa Pública de Puertos de Andalucia la que otorga las concesiones y la que, según los informes presentados por la actual concesionaria, le ha dado la razón, aunque sin embargo no toma medidas al respecto.

La explotación del puerto por parte de dos empresas, que además están totalmente enfrentadas, hace imposible el día a día para los negocios de Marina del Este, de hecho son muchos los que han cerrado en los últimos tiempos ante tantas dificultades. Los locales comerciales están divididos y todas las infraestructuras que les dan servicio (electricidad, agua, depuración) están seccionadas. La división del puerto por el conflicto entre la vieja y actual concesionaria tiene su más simbólico ejemplo en un muro de ladrillos que separa en dos las instalaciones. Así las cosas más de una tercera parte de la superficie del puerto deportivo permanece paralizada o con las construcciones bloqueadas y el resto se muere porque sin servicios no llegan visitantes.

En concreto, permanecen una veintena de locales comerciales cerrados y sólo están abiertos ocho, que apenas reciben turistas, en una zona que podría ser un auténtico paraíso. «Es una auténtica pena, una pena», repite el director del puerto deportivo, Jesús Sáez que se queja del bloqueo que sufren sus instalaciones.

Marinas del Mediterráneo insiste en que recibió una concesión con «irregularidades latentes» puesto que la anterior concesionaria nunca acabó de marcharse y reprocha a la Junta su «falta de firmeza» para resolver el conflicto. «La que nunca ha tomado la decisión de ejecutar la concesión ha sido la EPPA, nosotros tenemos resolución de Obras Públicas y de la EPPA sobre depuración de propiedades en Marina del Este en la que les instan a cedernos los terrenos, una resolución que no se ha ejecutado por falta de firmeza», lamentan los responsables de la empresa.

Pero eso sí, Marinas del Mediterráneo no dispuesta a aguantar más esta situación. Con el conflicto enquistado en los tribunales y la Junta sin ejecutar esta resolución... «Nosotros vamos a tirar por la calle de enmedio y poner todas las infraestructuras en marcha. Y después esperaremos consecuencias. Llevan siete años sin actuar y aquí no esperamos más», señala el portavoz de la empresa.

Este periódico intentó conocer la versión de la EPPA sobre el conflicto de Marina del Este y no recibió contestación. «Este puerto está lleno de posibilidades y sin embargo nos han abandonado a nuestra suerte», denuncian.