El reto de las ciudades que organizan un gran evento internacional es dar respuesta al 'día después'. Para responder a esta pregunta, el Consorcio Valencia 2007 sacó a concurso la futura Marina Real Juan Carlos I, una actuación urbanística que abarca la desembocadura del Turia y la zona portuaria que hoy ocupa la America's Cup. El objetivo es que después de esta edición del evento deportivo, Valencia continúe teniendo su mirada puesta en el mar.
La ciudad de Castellón también ha sabido aprovechar los buenos aires que ha supuesto la America'sa Cup. Así el Real Club Náutico de Castellón terminó su remodelación el año pasado, después de una inversión de 5,9 millones de euros, y la construcción de 450 nuevos amarres.
La ciudad, por su parte, decidió en 2005 cerrar, como Valencia, su dársena interior al tráfico comercial para darle un uso recreativo. En total, Castellón, ofrecerá 800 amarres nuevos gracias al tirón de la America's Cup...