El Periódico de Huelva publica un reportaje sobre la difícil situación del sector náutico en la provincia de Huelva. Marina Isla Canela y Marina El Rompido, puertos deportivos asociados a Marinas de Andalucía, son protagonistas de este reportaje.
"…Esta situación provoca también la contracción del turismo náutico, que supone una importante fuente económica. Wolfgang Michalsky, de Marina El Rompido, desvela cuál es la repercusión de este segmento turístico. “El gasto medio por tripulante ronda los 100 euros diarios en la modalidad de alquiler. 5 de ellos se quedan en el puerto y el resto en el municipio. Si la embarcación tiene propietario, el gasto medio es distinto, al ser 50 euros diarios. No obstante, las compañías de alquiler que han intentado entrar en el mercado de Huelva se han rendido por la mala señalización de los canales, como por ejemplo en el Río Piedras y la deficiente situación de algunos puertos”, explicó Wolfang.
La carestía de los puertos públicos y la diferencia en el servicio han reproducido un trasvase de clientes hacia los puertos privados. Como muestra, varios botones: Marina El Rompido está al 50% de su ocupación (y espera llegar al 80% en verano) y Marina Isla Canella llega hasta el 55%.Sin embargo, en algunos puertos públicos no llegan ni al 20%, como los casos de Punta Umbría (14%) y el Terrón (16%). Destaca, no obstante, la ocupación de Isla Cristina, con un 68%.
Tras del Decreto 368/2011, la Agencia de Puertos Públicos de Andalucía ha intentado corregir las tarifas, algo que ha provocado una distorsión en el sector. Con respecto a los dos años anteriores, la ocupación en Marina Isla Canela ha descendido un 20%. Manuel German, su director, manifestó con respecto a los puertos gestionados por la APPA que “han bajado sus precios aplicando descuentos que luego no trasladan a las concesiones privadas y que siguen ahogando a los concesionarios con cánones desmesurados que hacen inviables las concesiones y rompen el principio de ‘equilibrio económico’ de otorgamiento”.
La disparidad de tarifas con los parámetros europeos desemboca en otro hándicap competitivo. El cliente de paso obvia la Costa de Huelva y prefiere las zonas portuarias más económica (Algarve). “No son normales los precios que se pagan en España por un amarre. De hecho, son un 40% más caros que en Holanda o Inglaterra. Así es difícil competir y nosotros, sin embargo, lo hacemos porque optamos por equiparar la tarifa al nivel internacional”, explicó Wolfang…".