Los puertos deportivos y clubes náuticos de Balears iniciaron abril con una ocupación casi total de sus amarres y, a medida que transcurra el mes, llegarán a estar al completo. Estas excelentes perspectivas chocan con un problema que arrastran desde hace años: podrían tener una cifra superior de barcos en sus dársenas si dispusieran de infraestructura para disponer de más amarres.
El presidente de la Asociación de Clubes Náuticos de Balears, Joan Noguera, cifra el déficit de amarres en 10.000 unidades, y lamentó que "tengamos que rechazar peticiones de extranjeros por no poder satisfacerles". Señaló que hay overbooking en los clubes y cree que la permisividad de los fondeos es algo "anormal".
Desde la asociación de puertos deportivos Anade, su presidente, Ricardo Ferrer, comentó que "las previsiones son de un 100 por ciento de ocupación a partir de finales de abril y durante todo el verano". Vuelven a aumentar los navegantes británicos, mientras que los alemanes podrían suavizar su crecimiento.
Los puertos deportivos rechazan los fondeos pero tampoco ven utilidad el construir marinas secas porque "deben situarse junto al mar o muy cerca, porque un barco debe ponerse en el agua sin demora, y a los quince minutos de recibir la petición. En Mallorca no hay terrenos disponibles junto a los puertos o clubes náuticos para desarrollar esta idea", señaló Ricardo Ferrer.
A la vez, el presidente de Anade reclamó sentarse con el Govern a dialogar sobre la situación. "No debe haber miedo a planificar. No se trata de construir ni estropear el medio ambiente, sino de planificar nuestro futuro, y creemos que se debe evitar el complejo que existe a hablar de estas cuestiones", añadió Ferrer...