Los empresarios de chárters náuticos colaborarán a partir de ahora con la Agencia Tributaria para evitar el fraude en el impago de impuestos que se da en el sector y ésta, por su parte, investigará exhaustivamente la piratería, el intrusismo y la competencia desleal, según un convenio firmado hoy entre el organismo estatal y la patronal más representativa de esta actividad.

Así lo manifestaron hoy, tras la firma de un convenio de 'acuerdo de entendimiento' el delegado especial de la Agencia Tributaria para Baleares, Raúl Burillo, y la presidenta de la Federación Española de Alquiler Náutico (Fenan), Cristina Sastre, que tuvo lugar en Palma de Mallorca, tras gestarse durante los últimos dos años, y que contempla obligaciones en ambas partes, para mutuo beneficio.

En el sector del chárter náutico se da la circunstancia de que la mayoría de las embarcaciones en alquiler pertenecen a particulares que las ceden a empresas que ejercen una labor de intermediación con los eventuales inquilinos --a diferencia de los 'rent a car', que suelen tener sus vehículos en propiedad--, por lo que las firmas especializadas se comprometen a informar a partir de ahora a quienes les confíen barcos para realizar su actividad, y que se creían exentos de ciertas tasas por arrendar los yates una parte del año.

Por otro lado, los empresarios adheridos a Fenan suministrarán información precisa a la Agencia Tributaria sobre las actividades de intrusismo o de alquiler de yates de forma irregular, para que ésta realice las inspecciones y actuaciones habituales en estos casos, ya que los piratas eluden el pago de hasta un 28 por ciento de sus ganancias al erario público --un 12% del impuesto especial y un 16% del IVA--, lo que les coloca en situación ventajosa respecto al resto de la oferta.

A este respecto, Burillo consideró "modélica" la actuación de la Fenan y, además, agradeció la colaboración de la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación de Mallorca en la gestión necesaria para alcanzar este convenio y destacó que se trata de uno de los primeros acuerdos de entendimiento que se dan en España y, especialmente, en un sector de actividad que se distingue por la dificultad para ordenarlo.

El convenio, que también incluye la creación de un manual de buenas prácticas en el sector, ha sido recibido con "reticencia" por una parte de los profesionales y propietarios afectados, mientras que otros mostraron conformidad con el acuerdo y, en algunos casos, esperan una bonificación fiscal --los yates de vela dejarán de pagar el impuesto medioambiental--, así como una disminución de las inspecciones de la Agencia Tributaria, a la que Fenan atribuye un "exceso de celo" hasta ahora...