Los Mossos d’Esquadra detuvieron la semana pasada en Roses (Gerona) a cinco personas por transportar desde Málaga, y ocultas en un velero, 2,5 toneladas de hachís para su supuesta distribución en Cataluña. Los detenidos, de nacionalidad británca y holandesa, formaban parte de una organización internacional que los Mossos d’Esquadra investigaban desde el año pasado en colaboración con la Agencia Tributaria, tras detectar que una de las bases operativas de la banda se encontraba en Roses. Allí, los agentes localizaron una casa situada en el barrio residencial de Santa Margarida y con acceso directo desde un casa que los deincuentes podrían haber utilizando para almacenar y distribuir la droga.
La investigación, denominada 'Corleone’, se alargó porque los sospechosos no residían en la vivienda vigilada y de hecho pasaban largas temporadas sin visitarla, por lo que no fue hasta el pasado día 20 cuando se pudo detectar la llegada de un velero con un posible nuevo cargamento de droga. La embarcación había zarpado cinco días antes del puerto de Benaimádena en dirección a Estepona, según declararon sus tripulantes a las autoridades portuarias, aunque el velero no llegó nunca al destino previsto, sino que se dirigió hacia Roses.
La noche del pasado día 21 un dispositivo de vigilancia apostado junto a la casa del barrio de Santa Margarita permitió comprobar cómo cuatro hombres y una mujer descargaban numerosos fardos y los introducían en la casa.