El PGOU de Málaga deberá resolver las fuertes diferencias que marca el estudio de impacto ambiental de la Junta, que considera “inviable” determinadas actuaciones previstas en el texto como la urbanización al norte de las rondas, el puerto deportivo de Arraijanal o las torres de Repsol.
En un esfuerzo desconocido el PGOU deberá acomodarse, sin conocerlo, al futuro Plan de Ordenación del Territorio (POT) del área metropolitana que la Junta debe tener ya muy avanzado y del que apenas se conocen unos planos...