Paralelamente al informe sobre la concesión de Banderas azules otorgadas por Adeac, Ecologistas en Acción publica su listado de 'Banderas Negras'. Así, Almería se lleva 11 banderas negras y un punto negro, Cádiz 15 banderas y 22 puntos negros, Granada 8 y 9 banderas y puntos respectivamente, Huelva empata con 5 y 5 y Málaga obtiene 11 banderas y 19 puntos negros.
Por noveno año consecutivo el grupo ecologista presenta en Andalucía su campaña “Banderas Negras”. La iniciativa, nacida en 1999, es una denuncia pública de aquellas playas o tramos de litoral que sufren vertidos contaminantes, agresiones urbanísticas o cualquier otra actuación que ocasione una pérdida de calidad ambiental del litoral.
Las dos calificaciones negativas otorgadas son:
- Bandera Negra: Impactos de mayor gravedad (vertidos contaminantes y/o agresiones urbanísticas).
- Punto Negro: Impactos significativos, pero de menor gravedad.
La campaña de Banderas Negras pretende hacer una evaluación ambiental integral del litoral andaluz. De tal forma, que los ecologistas valoran los impactos producidos por la contaminación y por la urbanización:
En el primer caso se tienen en cuenta la existencia de vertidos, el funcionamiento de las depuradoras y la calidad de las aguas de los ríos que desembocan en el mar. Por desgracia, la creación de la Agencia Andaluza del Agua no ha generado todavía efectos positivos en la recuperación de la calidad ambiental de nuestros ríos, lo que se traduce en graves problemas ambientales en sus estuarios y desembocaduras, declaran desde Ecologistas en Acción.
En el segundo caso, los ecologistas evalúan el respeto a la normativa legal y el impacto sobre los ecosistemas naturales y sobre los recursos, en especial sobre agua, suelo y paisaje. Según el grupo, el avance del ladrillo y su relación con la corrupción han marcado la vida política y económica de los últimos tiempos. Aseguran que tras muchos años de desmadre inmobiliario, por fin se empieza a plantear un cierto debate social en torno a la ordenación del territorio y al modelo urbanístico. "Está quedando claro que el hasta ahora vigente modelo del 'todo urbanizable y todo especulable' es contrario al interés social, por estar destruyendo recursos naturales esenciales, por la corrupción que propicia y por el encarecimiento abusivo de la vivienda. Reivindicamos el cumplimento estricto de la Ley de Costas, así como nuevas normas como el POTA (Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía) y la Ley del Suelo para que el urbanismo recobre su finalidad social y la subordinación al interés general", manifiestan desde Ecologistas en Acción.