Queda poco menos de un mes para el inicio de la undécima edición de la Semana Náutica Ciudad de Melilla y el ambiente previo ya empieza a notarse en el Puerto Deportivo. La «logística» ha comenzado a arrancar motores, según comentó ayer el viceconsejero en funciones de Deportes y presidente de la prueba náutica, Francisco Robles, quien en rueda de prensa comentó que el próximo fin de semana ya estarán instalados todos los módulos prefabricados desde donde se mueven los entresijos de la organización.
Al tiempo, a mediados de mes se irá incorporando el personal que hace posible la prueba náutica; especialmente los voluntarios, para quienes Robles tuvo palabras de agradecimiento. El viceconsejero señaló que «muy probablemente», la organización apostará este año por la clase GP 42, el «segundo escalafón» de la vela, señaló, para la que se espera que haya al menos cinco barcos en liza. De momento dos están confirmados y Robles tiene previsto viajar hoy a Valencia, donde se celebra la Copa de Vela, para intentar cerrar algunos compromisos más.
En cuanto a la clase 670, que es en la que compite el Ciudad de Melifla, el viceconsejero también espera que haya un mínimo de cinco para que la competición sea más reñida. El viceconsejero recordó, además, que este año también habrá barco golondrina para que los melillenses vean la competición de cerca y disfruten de la regata.