Greenpeace terminó hoy su campaña en el Guadiana denunciando la gran operación urbanística que se está fraguando en todo el Bajo Guadiana con la connivencia de los municipios de la ribera, de la Confederación Hidrográfica del Guadiana y del Instituto del Agua portugués. Activistas de Greenpeace desplegaron a última hora de ayer sobre las obras de la carretera de acceso al puente transfronterizo una pancarta con el lema "Destruir para especular". Así quisieron llamar la atención sobre la operación especulativa que la Diputación de Huelva y el Ayuntamiento de El Granado están realizando impunemente en un área protegida. El proyecto que se esconde tras el puente incluye 3.000 viviendas, hoteles de lujo, un centro hípico, dos campos de golf de 18 hoyos, centros deportivos y comerciales y un puerto deportivo.