A las once y media de la mañana el sol de julio ya pega con justicia en el puerto de la EPPA, situado en Sancti Petri. Los niños, un total de cincuenta de entre 8 y 16 anos, esperan impacientes su turno para subir al barco, que durante poco más de una hora les llevará por las proximidades del Castillo y por el caño de Sanctí Petri.
Ésta es una de las actividades que forma parte del campamento de verano organizado por el Ayuntamiento en la granja escuela Campano. Una oferta que, como en pasadas ediciones, hizo que las plazas se agotaran a los pocos minutos de abrirse el plazo de inscripción, y eso que este año se duplicó el número, ya que son dos los campamentos ofertados. Explica Desi, una de las monitoras de la granja escuela, “el campamento a ellos les cuesta 30 euros, mientras que normalmente vale 300. Y, además, la mayoria de los niños que vienen repiten en los años siguientes”.
Un claro elemplo es María, de nueve años, que ya estuvo el verano pasado y no ha dudado en apuntarse de nuevo. Para ella lo más divertido son “las actividades acuáticas y las veladas de las noches”. En eso coincide con su compañera Lidia de diez años, que se decanta también por la playa y las piragüas. Ana, que también tiene 10 años, prefiere la piscina y montar a caballo...