Los jueces de la Audiencia de Palma de Mallorca han determinado que el promotor inmobiliario y constructor Francisco Hernando, conocido como El Pocero, que levanta una macrourbanización de 13.000 viviendas en un secarral del municipio toledano de Seseña, no será, como pretende, el propietario del puerto deportivo de lujo de Puerto de Portals, en Mallorca, donde amarró su enorme yate el Clarena, de 46,5 metros de eslora.

El Pocero pretendía construir un casino y un hotel submarinos y duplicar la capacidad del puerto privado, después de confiar en que Jaume Matas, presidente de Baleares hasta hace un mes, le prorrogaría la concesión del puerto. Matas, líder del PP en Baleares en los últimos años, decidió abandonar la política tras no encontrar un solo aliado parlamentario para garantizarse un nuevo mandato de cuatro años al frente de la comunidad autónoma.

La Audiencia rechazó la pretensión del promotor inmobiliario de hacer valer su proposición de compra del complejo de Portals por 9,3 millones de euros —cantidad que no abonó en vez de los 110 millones que acordó en 2005. “No puede exigir el cumplimiento del contrato al no haber entregado el precio dentro del plazo estipulado”, señala en su argumentación el auto judicial para rechazar las pretensiones de El Pocero.

Hernando pleiteó contra el magnate industrial alemán Klaus Graf, propietario del concesionario del puerto, que tiene 670 amarres y una gran red de espacios de ocio litoral, valorado entre 116 y 260 millones. El Pocero quiso quedarse con la instalación por un precio inferior al pactado, al asegurar que se le había engañado en la valoración, por el tiempo vigente de la concesión.

Esta es la segunda sentencia adversa al promotor inmobiliario por este caso. En un juzgado de Palma de Mallorca, Hernando mantiene viva una querella contra los dueños del Puerto de Portals por haberle dejado, por la fuerza, sin amarre para dos de sus barcos de lujo.